Para mí, esta ha sido una lectura muy normalita. Ha pecado de previsible para mí, y se va a quedar en un cajón de libros que han pasado sin pena ni gloria.
Oak y Vaughn me han parecido personajes simples y cuyo desarrollo se me ha vuelto extremadamente típico.
Entiendo que haya gente que le ha gustado este libro (ojo, que a mí me ha gustado) pero no me ha parecido la historia tan bonita que cuentan todos que es. He leído historias muchísimo más bonitas en otros libros. Simplemente creo que esta no ha sido para mí.

Ninguno de los dos protagonistas me han encantado, cosa rara en mí en este tipo de libros. En la inmensa mayoria de este tipo de libros, me llego a poner en el lugar de los protagonistas, empatizo con ellos y siento. En este, nada de eso ha pasado. Siempre suelo acabar este tipo de libros con un pellizco en el corazón o simplemente llorando. Pero aquí no ha pasado. Aunque me ha entretenido el libro, me ha parecido demasiado poca cosita.

Creo que cuando para mí el libro iba remontando, la caída libre fue decepcionante. El final, ¿por qué? ¿qué ha pasado ahí? ¿no va a haber consecuencias? (La gente que lo haya leído entenderá de qué hablo). Me ha decepcionado que no hubiera resolución final a este problema que surge en torno al final.
Tampoco soluciona nada el epílogo. El epilogo para mí ha sido simplemente decepcionante. ¿Qué clase de epílogo ha sido ese? Me esperaba otro epílogo, quizás ¿más elaborado? No sé.

Después de leer este libro, he llegado a la conclusión de que en realidad, la forma de escribir de Elle Kennedy, una de las autoras bajo este seudónimo, es lo que me gusta. Me gustan sus historias y su forma de escribir, pero en compañía, me chirría todo. Puede ser por la influencia de la otra autora y que ambas tienen que llegar a un punto intermedio para que no parezcan dos personas distintas sino una sola escribiendo esta historia. Me pasó algo parecido con Los Royals de estas autoras.