A review by eibi
Madre Irlanda by Edna O'Brien

Irlanda siempre ha sido mujer, útero, cueva, vaca, Rosaleen, novia, ramera y, por supuesto, la demacrada diosa Hag of Beara (...) Estas infiltraciones han sido narradas e inventadas por hombres y médiums que han descrito la violación del cuerpo y el alma de Irlanda.

Con este comienzo, -que ya es toda una declaración de intenciones-, Edna O'Brien nos introduce en estas pequeñas memorias, publicadas por primera vez en 1976.
Hasta la fecha, no he encontrado a nadie que hable de Irlanda como ella; una tierra que adora, y al mismo tiempo le duele. Un pulso entre las luces y sombras de un país tan poético como duro que reflejó maravillosamente bien en 'Las chicas de campo' o 'Un lugar pagano'. Y es que, esta mujer no lo tuvo nada fácil para escapar de las limitaciones, prejuicios y rigidez a la que se vio sometida.

En este libro esboza un poco la historia irlandesa, su infancia en un pueblecito del condado de Clare, el colegio, su estancia en el convento, los primeros pasos en Dublín y finalmente, la huida a Inglaterra. Escenas de la memoria escritas de una manera muy evocadora que te conectan íntimamente con ella. Al mismo tiempo, no abandona su tono crítico, audaz e ingenioso (confieso que no he dejado de escuchar la voz de Baba de fondo).
Cada capítulo, además, se acompaña de las fantásticas fotografías en blanco y negro de Fergus Bourke, un añadido acertadísimo para completar el retrato de esta tierra indómita que me tiene medio enamorada y espero conocer algún día.

La lástima afloraba también, lástima por una tierra tan a menudo despojada, lástima por un pueblo reacio a admitir que algo va mal. Por eso nos marchamos. Porque suplicamos discrepar. Porque tememos la asfixia psicológica. Pero marcharse solo es condicional. La persona que eres es un anatema para la persona que te gustaría ser.