Llevaba mucho tiempo queriéndolo leer, pero las advertencias siempre me echaban para atrás. Sí es un manga fuertecito por los temas: un chico sádico que invoca un demonio para comerse sus tripas termina siendo su amante en una relación SÚPER cuestionable. Tenía miedo, y si lo empecé fue porque una amiga me dijo que chí me iba a gustar.

Me gustó mucho por varias cosas: la historia, cómo desarrollo la estructura social de los demonios; el desarrollo de los personajes y sus relaciones, cómo va evolucionando Makoto (el prota) es una cosa que me fascinó ver; la mezcla curiosa de cosas súper obscuras y de pronto cosas cómicas y adorables; y, por supuesto, el diseño maravilloso de personajes y el arte QUÉ BELLÍSIMO ESTÁ.

Pero no es para todos, en definitiva, así que sólo diré: proceda con precaución.