A review by thoughtmantique
Felicidad familiar by Laurie Colwin, Antonio Prometeo Moya

3.0

Un estilo sencillo, que hace que sea una lectura fácil y rápida, más he de admitir que a veces resultaba demasiado repetitivo: la gran mayoría de los párrafos inician con el nombre de alguien, y constantemente esos nombres se repiten para hacer hincapié sobre quién se está hablando cuando es bastante obvio que no se ha cambiado de sujeto. También repite a menudo la mismas palabra en frases muy cercanas («No es que la desdicha amara la compañía, es que necesitaba la compañía: la compañía y orientación de alguien que hubiera sentido la misma infelicidad.» [p.254]).

Desde un primer momento detesté a los Solo-Miller: sus tradiciones, su dinámica familiar, sus roles, su inalterabilidad. Soy totalmente incapaz de conectar con ninguno de sus miembros, pues sus papeles en la novela son sumamente estáticos y no muestran ninguna evolución. Además, a nivel personal, rechazo por completo este tipo de familias tan apegadas y que delimitan al milímetro el rol de cada miembro.

Me costó muchísimo conectar con Polly. La primera parte del libro se llena de sus quejas y tristezas que no se ven acompañadas de ninguna reflexión, algo que me arrastró al tedio durante la lectura. Poco a poco, eso sí, logré entender su lugar en sí misma y el peso que lleva a sus hombros. Se la describe como perfecta, amable, carismática, y aunque llegue a resultar a veces cansino e irreal lo 'perfecta' que resulta, más adelante en la novela se logra contextualizar y dotar de un significado más profundo.

Fuera de ella, ningún otro personaje resulta del todo tridimensional: cada uno mantiene su postura en la narración de principio a fin. Aquel con más profundidad resulta ser Lincoln, y aún así siento que a penas se rasca la superficie de su carácter, más allá de amar la soledad y de amar a Polly.

Fuera de todo lo dicho anteriormente tiene frases memorables, da pie a reflexionar sobre el papel que se nos otorga por nacimiento así como el peso que causan las expectativas de los demás en nosotros, y logra hablar del adulterio desde una perspectiva mucho más humana y menos sensacionalista.